jueves, 23 de agosto de 2012

E D I T O R I A L



POR QUIÉN DOBLA LAS CAMPANAS EL SINDICALISMO PETROLERO
 
 
Hondo pesar en la capital petrolera del Perú, por el sensible fallecimiento de un personaje mítico a quien la lucha sindical, lo llamara "Don Lucho"... en referencia a Luis Núñez Taiman. Un pueblo siempre acostumbrado en amanecer todos los días, escudriñando en los diarios la preponderancia de las noticias, se dieron con una, que entristeció los corazones. La infausta noticia corrió como reguero de pólvora, en pocos minutos todo Talara estaba conmovida.
 
84 años duró una vida de lucha, de avatares, integridad, perseverancia. Luis Núñez Taiman era un hombre hecho para el ejemplo. Nació, vivió y murió socialista. Nadie, ni siquiera la deslealtad que afrontó, la ingratitud, lo hicieron cambiar en su temperamento de hombre de profundas convicciones. Quienes escuchamos sus discursos en la Plaza Grau de Talara, nunca nos equivocamos, al señalarlo como el orador mas convincente de la historia del sindicalismo petrolero.
 
A las coplas de esa insuperable historia que dejó huellas profundas; como valor agregado, merece citar la confianza de Juan Velasco Alvarado, quien lo convocó para confiarle un 9 de octubre de 1968, que ese día, juntos bajarían la bandera "Yanqui" de las instalaciones petroleras de Talara, y en su reemplazo izarían la bandera del Perú. Es que el conductor de la revolución nacionalista de las FF.AA., estaba al tanto del espíritu inquieto y revolucionario de "Lucho Taiman", como cariñosamente lo llamaban sus hermanos trabajadores.
 
Y de la misma manera como la Internacional Petroleum Company-IPCº, masacró, torturó y dió muerte, en complicidad de los esbirros de la dictadura del gobierno peruano; de la misma manera, con el mismo estilo, la opresora como sabuesa experta, perseguía, acosaba, calumniaba, al invencible dirigente. Aplicándole sus maquiavélicas fórmulas de vencer a los luchadores, compraron a un equipo de médicos peruanos, declarándole incapacitada su salud para el trabajo. Posteriormente, patriotas médicos amigos, y muy dignos de su moral, desenmascararon la patraña de la imperialista.
 
Por su consecuencia como ciudadano honesto, probo, limpio; el Gobierno de la FFAA. le confió el manejo de la alcaldía de la Municipalidad de Talara; posteriormente, sometiéndose al veredicto popular, venció inobjetablemente, con el aprecio y reconocimiento de un pueblo consciente de su valía. Allí en el desempeño de este cargo, también, le cupo demostrar sus cualidades de ciudadano organizador,limpio y cristalino. Ejerció el mandato popular cuando los cargos se desempeñan por servicio, no habían sueldos, ni enriquecimientos ilícitos, menos cabida para la corrupción.
 
El ciudadano Luis Núñez Taiman (QEPD), con su actitud inquebrantable, sobrepasó la valla de las esperanzas de una masa trabajadora y de un pueblo, que apreciaron de su dignidad de luchador puro y nato. Para Talara no solo deja una hoja de vida brillante, en el contenido mas puro, encierra un itinerario poblado de una portentosa nobleza.
 
Al promediar las 8am. del día 22 de agosto del 2012, los nobles repliques de las consciencias ciudadanas, se preguntaban, por "quién doblan las campanas"?, y la respuestas se iban dando una a una, precisando que Talara, vivía a partir de ese momento la hora infausta del luto, del dolor, el pesar, por una lucha que no logró a tiempo, el reconocimiento de la déspota indiferencia.
 
Ya "Don Lucho", va en viaje inmarcesible, es el vuelo de los inmortales, en itinerario rumbo a las estrellas. Sintiendo que su vida se encontraba en el ocaso que no dá tregua, escribió 4 libros, precisando sus experiencias, haciendo revelaciones ejemplares, ilustrando a las futuras generaciones de la forma como debe vivir un luchador sin fatigarse, sin claudicar, sin someterse al poder de los déspotas y autoritarios. Talara está con su bandera a media asta, y los repliques de las campanas se hacen mas persistentes, avisando que Don Lucho, dejó de pertenecer a este mundo.

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