E D I T O R I A L

PETROLEROS TEMEN QUE NO HAYA REVERSIÓN DE LOTES PETROLEROS

Talara, ya no es el viejo campamento petrolero que nos habló la historia, tanto su viejo como nuevo destino, se han conciliado a partir de una fecha nacionalista, que comenzó el 9 de Octubre de 1968, y protagonizada por un gran patriota don Juan Velasco Alvarado. De tal manera, que a partir de ese instante muy patriótico; la historia cambió, y el pueblo trabajador petrolero supo vindicar su historia y sus derechos.

Esto quiere decir que la historia, le facilita al noble pueblo de Talara, un credencial donde consta la revalidación de su gesta, su lucha, sus valores, su importancia. Talara asimiló y comprendió el mensaje y poniéndose la divisa nacional, trabajó con ardor, poniendo toda su cuota de esfuerzo buscando que una Empresa Nacional como Petróleos del Perú, sea siempre la expresión legitima de peruanidad.

Para desgracia de este gran propósito peruano, la solvencia de ese esfuerzo duró muy poco, a pesar de los resultado del crecimiento industrial, tecnológico, empresarial, que le imprimió Petroperú. Sucedió que una anti histórica dictadura del señor Alberto Fujimori, la fracturó, remató a precio de chatarra sus activos, lotes, barcos, plantas de venta, grifos, oleoducto, etc. Ello dió lugar que empresas capitalistas petroleras desde 1993, asumieran la dirección de la industria petrolera del Perú, con el consiguiente millonario e ilegítimo beneficio que todos conocemos.

A manera de componenda y lesionando los elevados intereses nacionales, la dictadura en la ejecución de su comparsa, a esas empresas capitalistas, trató de asegurarles su "famosa estabilidad jurídica", suscribiéndo con ellas, contratos de privatización en diferentes modalidades de: 20, 30, 40, años de inaudita explotación de nuestro recurso. Manejándo ellas, la gran industria petrolera, "ya no constituía la imagen de Empresa quebrada, amarrada con pita", conforme la calificó la dictadura.

Al aparecer políticamente la figura del Presidente Ollanta Humala, reclamándose venir de canteras nacionalistas, prometió revertir, recuperar para el Perú, todo el patrimonio petrolero lesivamente entregado en contratos fraudulentos. Con ello, la esperanza volvió a flamear, se hizo creer que en el corto tiempo, el trabajador, el técnico, el funcionario peruano, iban a reasumir la conducción y dirección de nuestra industria petrolera.

Para ello, el nuevo Gobierno Peruano, ya contaba con una Ley 28840, que dispone el regreso de todos los lotes petroleros a favor de su propietario Petroperú, en la medida que los contratos fueran finiquitando. Expresamente esa ley, dispone la re-integración vertical volviendo en asumir todas los procesos, desde la explotación del recurso, hasta su comercialización de los combustibles puestos en el mercado.

Lamentablemente, y para asombro de los peruanos, la versión del discurso comienza a cambiar, asemejándose a la entrada del crudo invierno. Y ahora, el Ministerio de Energía y Minas, lo propio lo hizo Perú Petro, entre otros voceros del Gobierno, han comenzado a debilitar las credibilidades, especialmente de los trabajadores petroleros de Talara, rumoreando que no habrá proceso de reversión, los lotes seguirán en poder de las explotadoras, y a lo mucho Petroperú, se asimilará como socio minoritario.

Significaría la presencia de una bandera petrolera transnacional, sobre la bandera peruana de Petroperu. Significaría la traición mas grande de la historia, significaría ponerle trabas al PMRT. a quien obligarían a continuar comprando crudo a precio internacional, y a perder las esperanzas de la recuperación de la renta petrolera. Frente a esto, Talara, se prepara para defender su recurso.