E D I T O R I A L

Y AHORA QUIÉN NOS DEFIENDE O PROTEGE A TALARA?

Las noticias son muy preocupantes y los informes lapidarios, se viene las lluvias encima de la Región y ya sentimos como si el cielo también. Es que todavía tenemos bien gravados, los efectos de las lluvias que nos cayeron cual ladrón en el año de 1983 y nos dejó en ruinas. Precisamente el daño de mayor consideración como lo fué el colapsamiento del tema del agua, hasta hoy en día lo podemos superar.

El caso se complica a mayores -hablo del peligro que amenaza a Talara- lo apreciamos cuando el gobierno Regional, sigue creyendo que su jurisdicción es sólamente la ciudad de Piura donde concentra recursos, medidas, proyectos y voluntades. En esta mal llamada 'capital departamental', aún a pesar de los lloriqueos, se viene trabajando a la máxima velocidad. Todos los años disponen de los recursos para protegerse; pero para ellos, todos los años venideros vuelven a estar presentes las necesidades.

En la fecha, cuando los anuncios son ya los de fondo, es decir 'las lluvias sepultureras·, la ciudad que mas debe cuidarse, no registra ninguna movilización, monitoreo, simulacro que enmarque o ponga de manifiesta responsabilidad alguna. Todo en la ciudad capital y sus distritos, se muestran quietos, indiferentes, no hay desplazamiento de maquinarias, toma de previsiones, medidas de emergencia, absolutamente nada.

Una ciudad que por las bondades de sus recursos genera millones de divisas en moneda norteamericana por día, (promedio de 30 a 40 millones de dólares/día, solo en la extracción del crudo petrolero), no cuenta con la decisión de esas fuerzas económicas de planificar, organizar, proveer preventivamente una defensa técnica para su industria y toda su población.

De ocurrir aquí exactamente lo mismo del año 1983, las instalaciones donde se encuentra la Refinería de Talara quedará dañada, se paralizará el proceso de la Modernización de la Refinería provocando un retraso inconveniente para las expectativa en desarrollo. Las plataformas marinas que están bajo la administración de "SAVIA" en el zócalo continental colapsarán provocando derrames de grave daño ecológico.

Como Talara es una ciudad que no tiene un río que le asegure como a Piura y Sullana el abastecimiento del servicio de agua, el eje que la provee, con una extensión en mas de 80km. de recorrido, se desconectará como en el año 1983. Nuestros gobiernos bien nacionales como de la Región, han esperado que el tiempo se recicle, no habiendo tomado una sola medida de prevención.

En la experiencia de ese año siniestro de 1983, Talara como ciudad quedó aislada, sus vias de comunicación en todas direcciones se cortaron. La municipalidad de Talara en aquel tiempo traía el agua para su población en un barco contratado desde Panamá, los alimentos venían por el mar y sólo llegaban a nuestro aeropuerto los 'weekend' de la FAP.

Todo esto ocurrió, no es una fantasía, todo está escrito, nuestra historia lo sabe y por supuesto sus autoridades. Lamentablemente, en esa historia se ha producido un vacío, un silencio, sus páginas han sido extraviadas. Aquí para desgracia existen organismos que son puro parapeto, son monumento a la intrascendencia. Nadie ha tenido la capacidad y al intrepidez para levantar la voz ante el gobierno y describirle la degradación y el estado como se vive en la zona del petróleo. SOLO EN EL PERÚ TRATAN ASÍ A UN PUEBLO PETROLERO.

DIRECTOR DE ASPETA

RICALDI  RAMIREZ  RUIZ