viernes, 10 de febrero de 2012


A  C  T  U  A  L  I  D  A  D


LLUVIAS PELIGRO Y MUERTE


 "No hay plazo que no se cumpla", y alli están las lluvias pronosticadas con mucho tiempo atrás por el Senahmi; 'que suerte': dice este sistema autorizado, que el fenómeno además de ser algo inherente al cambio climático, también corresponde a un desplazamiento de inmensos volumenes de masa de agua que se desplaza desde Brasil y se precipita en la Costa Peruana.

Para tener una idea mas cabal de la gravedad de la situación que amenaza al país, hay que seguir el accionar del mismo Presidente Ollanta Humala, que en persona, se desplaza en las zonas de mayor emergencia nacional con el desbordamiento de rios, daños mil, viviendas destrozadas con la fuerza del agua, sistemas colapsados, interrupción de vías de circulación nacional.

Frente a esta grave realidad, los pueblos afectados piden ayuda, el estado de cosas y saldos es calamitoso, la tragedia nos gana y nos lleva mucha ventaja.  Equivocadamente, muchas veces decimos la culpa es de las autoridades, podría ser porque es una experiencia de la cual se ha tenido conocimiento y tiempo para interponer las medidas urgentes.  Pero estableciendo equilibrio en la explicación, en el afán de encontrar una respuesta asequible, para decir, que la causa y el autor de los daños corresponde a la madre naturaleza naturaleza. Ninguna autoridad ni gobierno tendría fuerza para ser autora de la magnitud del daño presentado.

Lo cierto e importante, es admitir, que estamos los peruanos bajo un gobierno nacional, cuyo Presidente, se le reconoce otra dinámica y mística para encarar las dificultades.  Ello, es bueno, alentador y esperanzador existiendo la seguridad que se tomarán todas las medidas no sólo para dar la ayuda necesaria a los pueblos damnificados, sinó que se concentrarán todos los esfuerzos de hoy para adelante para encarar las irresponsabilidades del pasado.

En la medida que los gobiernos de región y municipales con sus autoridades se pongan al frente de las defensa de sus pueblos dejando de lado actividades o programas no prioritarios, de ello dependerá achicar las fronteras al peligro, destrucción y muerte, lamentables efectos, de las lluvias torrenciales que se vienen precipitando.

Particularmente al pueblo de la provincia petrolera de Talara, hay que ofrecerle de las forma mas inmediata la protección y cuidado respectivo.  Se trata que en esta zona, particularmente en la ciudad de Talara, se ubica la Refinería de Petroperú donde se procesan los combustibles que provee al mercado del transporte nacional y otros.  Un descuido, una desprotección a este sector, podría ser  muy perjudicial para todo el mismo país.

El hombre peruano debe sacar fuerzas de flaqueza, hay que ubicarnos dentro de la realidad, hay que asumir con temperamento las responsabilidades.  Nada sacamos buscando como siempre chivos expiatorios.  Esta es una tarea de todos, ojalá asi se entienda.

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