miércoles, 5 de diciembre de 2012

N A C I O N A L

Energías limpias para el Perú

 

Lima cuenta con 6 rellenos sanitarios y a nivel nacional existen 8, a pesar que el requerimiento sobrepasa los 700. Se producen más de 14 mil toneladas diarias de basura que terminan en chancherías clandestinas o son botadas a cielo abierto, donde son quemadas, produciendo graves problemas, no solamente de polución ambiental, sino de generación de gases de efecto invernadero.
 
Frente a esta realidad, el relleno modelo del Callao ha permitido reconvertir un botadero de basura en un verdadero relleno sanitario, contando con reconocimiento internacional.
 
Se trata de un proyecto de mecanismo de desarrollo limpio diseñado con arreglo al protocolo de Kyoto por las Naciones Unidas en el Perú, y que va a reducir en 7 años cerca de medio millón de toneladas de CO2.
 
La empresa que gerencia este proyecto ha podido consolidar, en 18 años de experiencia, un modelo integral para la disposición final de los residuos sólidos, como una solución para la recuperación ambiental de los botaderos en el Perú.
 
La experiencia se inició en 2003, a partir de una alianza estratégica en el marco de una concesión pública privada, celebrado entre la Municipalidad Provincial del Callao y la empresa privada.
 
En solo 4 meses y con una inversión mayor a los 2 millones de dólares, se realizó la recuperación ambiental del antiguo botadero La Cucaracha, de 40 años de antigüedad, y entró en funcionamiento el relleno modelo del Callao.
 
Gracias al buen manejo operativo se logró implementar con métodos de ingeniería sanitaria y ambiental y con tecnología de punta.
 
El proyecto de mecanismo de desarrollo limpio, en el cual los gases generados por la descomposición de los residuos son captados para ser destruidos eficientemente bajo estándares internacionales, posibilitando su posterior uso en la generación de energía eléctrica o como gas natural vehicular.
 
Se ha logrado poner en valor la función que cumple un relleno sanitario, convirtiéndolo en una actividad productiva, que favorece la generación de ingresos económicos adicionales, los mismos que permiten la reducción de los costos del servicio a tarifas sociales, beneficiando a las municipalidades usuarias y con ello a los vecinos de Lima y Callao.
 
El presente modelo ha sido acreditado por las Naciones Unidas y avalado por el Banco Mundial, por la gestión integral de residuos sólidos, el eficiente servicio y su contribución significativa en la mitigación y adaptación frente al cambio climático.
 
El Perú es uno de los países más afectados por el cambio climático a nivel mundial, por ello urgen proyectos y modelos de desarrollo que reduzcan los efectos de este problema.
 
Una experiencia vital fue la instalación de la primera central térmica de biomasa en Huaycoloro, con una inversión de 14 millones de dólares, la cual tiene una potencia instalada de 4.8 megavatios (Mw) para abastecer al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN).
 
Se utilizan los 3.5 millones de kilos diarios de basura que recibe el relleno sanitario de Huaycoloro, que constituyen alrededor del 35 por ciento de los residuos sólidos que genera toda la ciudad de Lima.
 
Hasta hace algunos años, la idea de generar energía a partir de residuos sólidos parecía impracticable, pero se logró y el Perú pasó a la vanguardia de esta clase de tecnología en la región.
 
Además fue base para la generación de empleos directos e indirectos, lo que pone al proyecto como una realidad que cumple diversos aspectos, desde lo social hasta lo ecológico.
 
Generar energías limpias que no afecten el medioambiente, ha sido una de las constantes en los últimos años.
 
Tanto el Gobierno nacional como las regiones y especialmente las municipalidades deben priorizar el tratamiento adecuado de los residuos sólidos y las políticas de descontaminación.  


No hay comentarios.:

Publicar un comentario