CON LA VERDAD NO OFENDEMOS NI TEMEMOS
Si por lo que vamos a decir y cosas que venimos pensando en voz alta, responde a un de repente acuerdo equivocado de mantener discreto silencio, y no perturbar el 'ego chileno' mientras dure el juicio del diferendo contencioso en La Haya, no estamos en la situación de compartir, no lo creemos necesario. La libertad de expresión no se maquilla, o debemos ponerle pinzas, se internen a la congeladora por equivocado cálculo de conveniencia.
Un personaje importante de la política chilena hizo unas declaraciones que contenían un tufillo de amedrentamiento, advertencia, amenaza. Dijo, 'esperamos que los peruanos no se les vaya a ocurrir en el juicio, mencionar episodios de la pasada guerra del 79', eso no lo vamos a tolerar. La expresión lo dice todo, debíamos acudir al juicio amordazados, advertidos, disminuidos, posesionados de miedo adelantado.
Y toda la mayoría de los diarios peruanos, salvo excepciones, han informado con pinzas. Los espacios políticos especializados de la TV peruana, los noticiarios, radio etc. han emitido preocupante recortes y silencio. "No hay que exagerar ni expresar triunfalismos, no deberíamos extralimitarnos en vivenciar los oprobiosos recuerdos que tenemos guardado en el sentimiento soberano"; parece que es el comportamiento de la prensa peruana..
Muchas de esas raras complacientes opiniones, haciendo esfuerzos por no sobrecalentar las 'iras santas' de nuestro vecino chileno. Las corrientes de opinion van y vienen cargadas de explicaciones que nadie las ha pedido; por ejemplo garantizar que el Juicio de La Haya, no es vinculante ni supeditado a continuar con las relaciones y compromisos comerciales; los empresarios del país mapocho van a continuar desarrollando sus actividades normalmente. A los inversionistas chilenos que manejan muchos recursos como grifos petroleros, puertos, cadena de tiendas.. gratuitamente les hemos estado brindando satisfacciones no ajustadas a la razón histórica, libertaria, soberana.
Amen de la seguridad y gran respaldo a nuestro equipo diplomático que no dan margen a la mas mínima forma de desconfianza, tenemos la mas firme convicción que en muchos sectores de la peruanidad hemos acudido a La Haya investidos con guantes de seda. Claro, desde luego que si, lo estrategico exige no ser imprudentes, temerarios, no dar margen al pretexto de cualquier adversario que pretenda boicotear sabiéndose de antemano perdido. Esa es una estrategia usualmente aplicada por los que no tienen argumentos.
Pero el Perú como nación libre, soberana como lo dice nuestra Constitución de Estado, no tiene nunca por que disfrazar, esconder, abjurar la demanda de sus derechos. Recordemos a Manuel Gonzales Prada, quien no enseñó a ser mas peruanos con las históricas expresiones: "Rompamos el pacto infame de hablar a media voz".
La República de Chile, es no solo el país vecinos con quien tenemos grandes vínculos y aspiraciones de desarrollo; venimos trabajando en mancomunidad, el desarrollo de su vida política nos convoca al máximo respeto. Es mas, el Perú desde 1979 y posteriormente en 1929 con la devolución de Tacna y la suscripción del Tratado definitivo de Limites, nos brindó la oportunidad de evidenciar nuestro respeto a los compromisos adquiridos, tradicionalmente somos generosos de nuestras decisiones.
Por aquella verdad, es que no entendemos que para hablar de país a pais con Chile, hay que hacerlo a media voz, cuidando que ninguna expresión nuestra pudiera incomodar al león dormido. Eso es confundir, evidenciar un actitud timorata, exacerbar un sentimiento que lesiona el valor y tradición peruana. Decir la verdad, no significa auto-censurarse, prohibirse donde nada nos impide: "Con la verdad no ofendemos ni tememos"
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