viernes, 31 de mayo de 2013

PALABRA DEL DIRECTOR.

LORD A LOS LUCHADORES POR FORJAR LA DIGNIDAD


En cumplimiento a las leyes del tiempo històrico ya no puede esperarse que venga el futuro, pasen los años, para ocuparnos de los hechos trascendentes y por ende de sus protagonistas.
 
Las verdaderas historias para que sean tales, deben escribirse, perpetuarse ahora mismo. No tiene ni tendrá razón de ser, que el ciudadano o pueblo protagonista, pase a mejor vida sin llegar a conocer que sus gestos, su sacrificio, su ejemplo, de verdad fueron suficientes en el afán de otorgarle valor a la vida.

 

La Provincia de Talara reconocida por ser un enclave petrolero de elevada significación de aporte al Perú, sostiene la historia, que no necesariamente hasta allí llegó el límite de toda su trascendencia; esa historia también destaca por la gesta de sus gentes, sus trabajadores, sus héroes y mártires. Es una historia vinculante, generosa, que brinda la oportunidad de conocer que en esta tierra también se cuajaron voluntades dignas de toda admiración.

 
La fibra de esa historia anunció su veracidad con la puntualidad del reloj, inequívoca con la célebre HUELGA PETROLERA DE 1931. Ella, se constituyó en el hito de partida de una acción que conmovió el alma de todo un pueblo, orgulloso que vió nacer la esperanza de poder contar con una tradición elocuente, digna de las mejores causas. En 1931, apareció en el firmamento petrolera el nombre de Alejandro Taboada, nombre que cotejado en el diccionario de lo sublime, significa alegría de dar la vida por consagrar la felicidad de los demás.


Quiere decir que esa fue la fecha insigne cuando se prendieron los motores de un pueblo que muy pronto supo lo que significaba el vocablo barbarie. La bendita historia, acaso exige ese tipo de bautismo?, La verdad hizo que si esa valiente expresión de trabajadores petroleros no hubiera respondido a la altura de los grandes, Talara, no habría podido superar la exigente vaya que le permitió su ingreso al valle de pueblo que se pasea erguido sobre la alfombra noble de la historia.


Vinculando su evolución con la metamorfosis de un niño que luego se convierte en un adulto. Así, con el sacrificio de Alejandro Taboada Crisanto, muy pronto y a paso seguro, Talara ahora es un adulto sin acusar debilidades, baches históricos, genuflexiones. Talara, con sacrificio pago por su respeto, su dignidad y su derecho a merecer su inscripción entre los pueblos que no admitieron ser mancillados.


4000 ciudadanos: Mujeres, hombres, profesionales, estudiantes, recordando esta fecha, se propusieron reeditar la pujanza, integridad, estoicismo; y no le temieron al cartel de la corrupción enquistado en la Municipalidad de Talara, sobre protegida por hombres y autoridades viciosas, soberbias, compartidores de una senda de hechos delictivos. El pueblo petrolero al día 16 de mayo del 2013, lo eligió, para dar testimonio de la decisión de recuperar su dignidad ofendida, el honor de un pueblo vejado por una arpía de corruptos.

 
En esta fecha se reeditó la historia, se lavó la bandera de la conciencia, se rindió homenaje a los héroes y mártires de siempre. El pueblo sabía que vendría nuevamente la barbarie como en 1931, pero no le temió. Entonces en el enfrentamiento desigual con los gendarmes de la policía de asalto, apareció la gloria, la bravura de nobles mujeres, digna por su ejemplo y su decisión de sentar las bases de una Talara respetable. Por eso decimos para la historia: LORD PARA LOS LUCHADORES FORJADORES DE LA DIGNIDAD Y EJEMPLO.

 

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