CALIDAD EDUCATIVA

¿Qué profesión deben elegir los jóvenes?

 

ANTES DE TERMINAR la secundaria, la mayoría de adolescentes empieza a preocuparse por su futuro. ¿Qué estudiar? ¿Una carrera técnica o universitaria? ¿Cuál es más conveniente, una universidad o un instituto? Estas y otras preguntas surgen a lo largo de varios meses a medida que se aproxima el fin de la época escolar.

 

Para responder a estas inquietudes, los jóvenes que terminan la secundaria tendrán a su disposición el observatorio Futuro Profesional, que forma parte del proyecto ProCalidad, anunciado recientemente por el Gobierno. 

 

Esta herramienta resulta de vital importancia para los más de 350,000 jóvenes que cada año egresan del colegio y al querer seguir estudios superiores se encuentran con una amplia y confusa oferta de carreras en las 137 universidades  y 1,280 institutos de educación superior que existen en nuestro país.

Las principales consecuencias de esta falta de información son una mala elección de la profesión por seguir, deserción a media carrera, o desempleo al  final de los estudios porque la institución elegida no cuenta con las credenciales de calidad para ser considerada en el mundo laboral.

Otra consecuencia, no menos importante, es la demora para iniciar los estudios superiores. Según el Censo Universitario de 2010, la edad promedio de los jóvenes que ingresan a las universidades en el país es de 18.9 años, cuando lo ideal sería de 16 a 17 años, es decir, al año siguiente de que han egresado de la secundaria. Entonces, con el mencionado obervatorio se pretende ayudar a los miles de jóvenes peruanos a que tomen decisiones correctas y en tiempo adecuado para su formación, además de orientación para estudiar una carrera que realmente les garantice un futuro laboral.

 

 

Se trata de una web con información estadística. Allí el estudiante  tendrá información sobre qué egresados encuentran trabajo rápidamente, cuánto ganan, en dónde hay empleos y también un análisis de oferta y demanda de cuáles son las habilidades que requiere el mercado laboral.

Los alumnos pueden así elegir sus carreras con una mayor certeza de que al terminar van a conseguir un buen empleo y mejor remunerado, porque la información estará segmentada por especialidades, regiones, tipo de habilidades, qué instituciones tienen el mayor porcentaje de empleabilidad, entre otros dato valiosos. 

 

El país necesita técnicos capacitados para abrir nuevos espacios en las diversas ramas de la producción nacional.