POR RICHARD KINBOLL

 

D E S D E    M I    E S Q U I N A     

LOS DESAGÜES EN LA BAHIA Y LA PLANTA DESALINIZADORA.

 

 

Como si fueran el mismo universo de rios, riachuelos, nevados, que bajan de la Cordillera de los Andes, alimentan grandes territorios hasta ir a evacuar sus aguas a las costas del Pacífico; bajo la misma manera, enormes contenidos de desagües poblacionales van a morir a las playas que irrigan la gran provincia de Talara.

 

Desde el distrito de La Brea-Negritos, Punta Arenas (barrio de funcionarios de Petroperú), los residuos de procesos químicos de la Refinería, desechos fecales de las oficinas de Petroperú, evacuaciones de la población, oficinas de petroleras instaladas en la ribera como: Imi Sac, Club Petroperú, terminal marítimo, instalaciones de Savia, Zona de Tortuga, mercadillo acapulco, Parcela de ex. Petrotech, desagües de todos los AA.HH. del cono norte de la ciudad, Planta de generación electrica EEPSA, y etc. etc.

 

Todos los desechos residuales, orgánicos e industriales incluyendo los de barcos, vapores que acoderan en el puerto, van derechito a contaminar la Bahia, playas, puerto de Talara. Los diferentes estudios de impacto ambiental operados por distintas empresas que inician actividades en nuestro medio por exigencias de controles internacionales, no han introducido las medidas para anular los efectos de la contaminación al mar de Talara.

 

 

Esta observación es importante, no únicamente por el perjuicio ambiental que esta importante zona del Perú ha venido viviendo por muchos años. Es puntual, en el buen deseo de mostrar al Alcalde petrolero, la calidad ambiental del mar, fuente de abastecimiento, de donde pretende instalar las tomas de captación, transformación, desalinización de agua que suministrará para la alimentación a la población petrolera.

 

Una captación similar se operó a partir de 1975 en la construcción de la Planta de Fertilizantes en la zona de 'Malacas', ubicada a 10 km. al norte de Talara; la fase de operar la desalinización del agua de mar, se registró de un mar limpio, agua con escala mínima de contaminación.

 

 

La autoridad de la municipalidad de Talara, entre otras motivaciones para explicar su proyecto, asegura que el agua dulce que proviene del río Chira, contiene heces fecales, bacterias, microorganismos que no son eliminados en los proceso de clorificación, potabilización. Como médico, asegura que la construcción de una Planta desalinizadora es lo mas recomendable para captar agua útil al consumo humano.

 

 

Sin embargo, nuestro comentario deja constancia, que si bien es cierto que por el deterioro de los sistemas de potabilización, no se vengan produciendo una agua limpia sin el menor resquicio de impurezas; hay que tomar en cuenta que el total deterioro de la Bahía Pariñas es degenerativo; a ello, se debe agregar los peligros representados por los constantes derrames petroleros y cantidades de sustancias químicas desechadas desde las plataformas marinas.

 

 

Frente al caso, es necesario que Imarpe, la Marina de Guerra del Perú, la municipalidad de Talara, unan todos sus esfuerzos y provoquen un estudio que establezca con la mayor pulcritud los grados de contaminación que afectan al mar norteño. Con ese informen seguramente, se acabarán los caprichos, intereses creados, en torno a una solución final del agua donde se comprometa la salud de la población petrolera.