EL GRAN OBJETIVO DE LA INDUSTRIALIZACIÓN

 

 

ESTAMOS TOTALMENTE de acuerdo con lo expresado en Nueva York por el presidente Ollanta Humala acerca de la urgencia de nuestro país de desarrollar su propia industria con la más avanzada tecnología.

Uno de los referentes para alcanzar con éxito este objetivo nacional es la experiencia de los países asiáticos, donde se han logrado mejorar más rápidamente los Índices de Desarrollo Humano establecidos por las Naciones Unidas.

Hay que precisar que un país con industrias manufactureras demanda gente con mayores niveles educativos, por lo que la calidad de la educación en el sudeste asiático se desarrolló muy rápido, hasta el punto que hoy Corea del Sur, Singapur y Hong Kong ocupan los primeros lugares en el Programme for International Student Assessmente (PISA).

Por otro lado, un país con mayores industrias manufactureras demandan alta tecnología, la que permite incrementar la productividad de la mano de obra, y de esta forma los salarios reales de los trabajadores.

En Corea del Sur, por ejemplo, la participación de las remuneraciones de los trabajadores era de apenas un tercio del ingreso nacional hace tres décadas, esa proporción supera hoy los tres tercios.

Considero que la esperada reducción de la dependencia de nuestra economía de las exportaciones de materias primas, anhelada por todos los peruanos, disminuirá también la vulnerabilidad de nuestro país a los vaivenes de la economía internacional, incluida nuestra dependencia de la economía china.

Sin duda alguna, también reducirá los conflictos socioeconómicos. En nuestro país muchos proyectos de explotación minera han ocasionado conflictos socioambientales, incluso con lamentables pérdidas de vidas humanas.

Otra ventaja radica en que una mayor industrialización permitirá una mayor participación del sector mype en la cadena exportadora.

Sin embargo, para lograr esta meta, también se requiere un mayor direccionamiento del Estado, como sucedió en el Sudeste Asiático. Por ejemplo, mayor pro-actividad de los funcionarios que manejan el Fondo Marco para la Innovación, Ciencia y Tecnología (Fomitec), creado acertadamente por el actual Gobierno para impulsar los proyectos innovadores y tecnológicos del sector privado.

Asimismo, promover la inversión en Investigación y Desarrollo como vienen haciendo los países industrializados en el mundo, en donde esta alcanza hasta el 3.5% del PBI, en tanto que el Perú se ubica aún por debajo del 0.5%

Otra recomendación, a la luz de lo expresado por el presidente Humala, es precisamente promover agresivamente la inversión extranjera directa en proyectos que lleven a la creación de industrias manufactureras en el país.