A C T U A L I D A D

Piden invertir en salud mental

Enrique Macher afirma que ciudadanos serían más tolerantes

Incidiría en la reducción del consumo de drogas y alcohol

El Estado debe invertir en salud mental porque ello trasunta en la calidad de vida de las familias, permite a la población conocerse y ser más tolerante con los demás.

El director general del Instituto Nacional de Salud Mental Honorio Delgado (Hideyo Noguchi), Enrique Macher Ostolaza, dijo que priorizar la salud mental genera, por ejemplo, la disminución de los accidentes de tránsito y reduce el consumo de alcohol y drogas y la corrupción.

–¿Por qué el Estado tiene que invertir en la mejora de la salud mental de la población?

–Sí. Sin salud mental no hay salud. Eso se trasunta en la calidad de vida. Se invierte para que la ciudadanía se conozca más a sí misma y a los otros; sea tolerante y desarrolle valores humanos.

Esto es importante, sobre todo, en un país como el nuestro, que es tan rico y diverso, que no tiene comparación con otros del mundo.

–¿Qué gana el Estado?

–Mejorar la calidad de vida. Disminuir, por ejemplo, los accidentes de tránsito, reducir el consumo de alcohol y drogas, desaparecer la corrupción y aumentar la felicidad.

Tiene que invertirse en recursos humanos. El Estado debe acercar la salud mental a la población mediante los trabajadores del sector. En estos momentos estamos acercando a los que trabajan en los puestos y centros de salud. Pero falta dotar a los establecimientos de equipos adecuados.

–¿En qué otros aspectos se debe invertir?

–En promover la cultura de la mejor educación. En las familias hay que mejorar los estilos de crianza y promover los valores humanos, es decir, la honestidad, la verdad; como lo hicieron nuestros antepasados con las frases que conocemos: ama sua, ama llulla y ama quella.

Los adultos tenemos que dar el ejemplo y las autoridades, también. A veces los que adquieren cierto poder creen que pueden hacer lo que les da la gana, sin ser escudriñados por la sociedad civil, por ejemplo.

Otro aspecto que merece inversión es el laboral. El sector trabajo tiene que mejorar las condiciones, lograr que no sea solo un deber, sino un querer. Si garantiza acceso al empleo, está invirtiendo en salud mental.

–Según un estudio elaborado por ustedes, Chimbote y Tarapoto son las ciudades cuya población expresa más alegría en el país,

¿por qué?

–Por cuestiones culturales, estilos de crianza. La felicidad es multifactorial.

Lo cierto es que ese resultado, esa constatación, es una oportunidad para expandir ese tema en la comunidad, para promocionar la salud mental.

Los estilos de vida pueden llevarse hacia otras ciudades y comunidades. Empecemos a probar, somos un país muy heterogéneo.

El positivismo como meta

Para el psiquiatra Enrique Macher Ostolaza existe salud mental positiva, es la que lleva a una persona a lograr una calidad de vida mejor. "Si una persona es capaz de estar bien consigo misma, con el otro y de resolver problemas de la vida cotidiana, tiene una buena salud mental", explicó el especialista.

Tal situación le permitirá participar activamente en su grupo familiar, laboral o social y promover más salud mental, en este caso, positiva.