O P I N I Ó N 

EL DÍA DEL DEFENSOR DEL DERECHO

Este día 02 de abril está asignado por la sociedad para rendir un tiempo de respeto, otorgar las consideraciones que se merece el ABOGADO PERUANO. Bien se ha hecho en disponer de un día al año para reflexionar en aquella persona que da su tiempo, su vida, su pasión ocupándose de la hermosa Ciencia del Derecho.

En cualquier circunstancia se amerita la función, la predisposición de un ser humano de invertir un universo de recursos desentrañando enigmas conceptuales que entorpecen el sentido de equidad, igualdad, justicia en todos los procedimientos y conductas humanas. Si confrontamos la vena de aquellos hombres, con lo inhóspito que es influjo en un mundo quebrantado en sus valores, se dará cuenta de la grandeza de quienes se empeñan en llevar sobre su hombros la balanza de la justicia.

En la etimología de la razón, un hombre del derecho, se refiere a la especie humana atribuido para abogar por la justicia. En su búsqueda utiliza todas las herramientas conmensurables que acrediten la legalidad de las cosas. Esta es la definición en el mas puro concepto del derecho. Por esto el debido respeto, la exaltación para el ser que posee un alma justiciera. No estamos definiendo hombres de carne y hueso en la acreditación de una opinión justa, acreditamos los valores, el agua viva que dota de sabiduría, actitud infranqueable e impenetrable para no desdecir de la misión de ser protagonista de la Justicia y el Derecho.

Creemos estar precisando con suficiencia por la imagen que nos pondera un hombre en la sociedad que cautela el principio genérico de la abogacía. La vida, la civilización sin derecho, se hubiera tornado en un estado de conflagración sin retorno; la civilidad se traduciría en un esperpento. Ponerse la vestimenta y enrolarse en el ejército que tutela la justicia, meritoriamente es una respuesta sensible a los cánones y valores que rigen los principios supremos de la vida.

Nos honramos pues escribir estas líneas para ese insigne profesional que la sociedad le encarga la prolija misión de ser los elementos catalizadores para procesar auténtica justicia. Esta será buena, digna, satisfactoria cuando se conecta a la intervención ética y jurídica del abogado. Esa misma justicia cuya causa y logro está en relación directa con el esfuerzo, producción y sanidad espiritual de su protagonista.

Precisamente por haber sido elegido como razón de vida, ser hombre del derecho, no se puede admitir que sean prolijos adoradores de íconos mercantilistas. El abogado de quien nos estamos refiriendo, debe ser quien asuma con toda pulcritud, luche y defienda un solo valor: "El honor de su causa y esfuerzo". Sobreabundando, abogado, es a quien la sociedad entrega sus credenciales, confianza irrestricta para la defensa de la legalidad. Ese hombre del Derecho, honra a sus principios y enaltece su profesión cuando asume la defensa inspirado en la puridad de todos los fundamentos.

Por aquel profesional que se ha trazado la meta y ha jurado ser causa de justicia, para exhortarle entregándole un mensaje de confianza. El Derecho es el camino recto y limpio, lejos de atavismos. El Derecho es la herramienta primera y única de la justicia. Constituye un enorme reto de capacidades. En este importante día, para decirles a los abogados cuán grande y edificante es la causa y la esperanza de oirles, interpretarlos, admirárlos cuando asumen la excelsa función que les otorga la Nación.

EL Blogs de noticias Talara, felicita en este su cálido día a todos los abogados de la Provincia de Talara.