domingo, 31 de julio de 2011

OPINIÓN… Crecimiento sí, cambio? y la inclusión???

Escribe:
Francisco Muguiro Ibarra (*)

Cuando hemos ido a las elecciones, unos han votado por Keiko, porque su voluntad era afirmarse en el continuismo, y en el crecimiento, aunque no hubiera inclusión, pero sí insistiendo en los programas sociales más asistencialistas. Otros han votado por Humala, pero su voto era más contra Keiko, pero la mayoría, así como por Keiko votaban porque no hubiera cambio, por Humala votaron porque querían el cambio, y muchos cambios radicales. Y este deseo, expresado de muchas formas y bastante correspondido por la promesas de la campaña de Humala, es lo que indujo al miedo a los sectores A y B para que organizaran campaña tan millonaria y tan sucia, incluso comprometiendo la credibilidad de los medios de comunicación más importantes del país.

En encuesta publicada por El Comercio aparece que en el Nivel del Sector Económico A (NSE) el 58% quiere cambios moderados en el sistema económico, mientras que en los sectores D y E el 48% y el 45% respectivamente quiere que sean radicales; y es importante anotar que el 43% del sector C pide también cambios radicales. (El Comercio, 20 d Abril del 2010, pág. b7 Economía). Lo que significa que de los NSE CDE el 45% querían cambios radicales, los demás cambios moderados y solo el 8% preferiría que continúe el actual modelo económico.

Cuando se han ido dando los nombres de las personas importantes que regirían nuestra economía y vemos a Julio Velarde Flores, en su puesto del Banco Central de Reserva y a Luis Miguel Castilla Rubio, viceministro de economía del gobierno saliente, que pasa a ministro del nuevo gobierno, en la misma cartera, tendríamos que decir que el elegido Presidente Ollanta Humala no ha optado por los cambios radicales, a lo más por los moderados, que le dictaran ese 58% de los Niveles del Sector Económico A y B, cuyos representantes han sido elegidos para dirigir la economía del país. Así que ese 45% de los NSE CDE se van a sentir frustrados y con pocas ganas de apoyar las políticas del candidato que eligieron.

Pero otra cosa que me preocupa es hacia dónde van dirigidas las voluntades y los intereses de los sectores empresariales y de los políticos actuales. El problema es que siga el crecimiento, les cuesta añadir: pero con inclusión, y una vez que se han conocido los nombres de los que van a dirigir la economía, ya se olvidaron de la inclusión. Vamos seguir creciendo, dicen, sin darse cuenta que el crecimiento es un medio para el desarrollo, pero que si no hay inclusión, ese crecimiento no es desarrollo, y lo que genera, además de ampliarse la brecha entre pobres y ricos, es descontento y agitación social porque crecen las expectativas de todos si ser satisfechas.

Lo que me impresiona es la voluntad política que existe entre las clases dirigentes por asegurar el crecimiento del capital económico y la poca sensibilidad y por tanto voluntad política para asegurar el capital social y humano el país, no solo el que vive en pobreza, sino la mayoría de los peruanos/as que reciben una educación de tan baja calidad. Nadie se preocupaba del ministro de educación, ni de salud, que son los que cuidan el capital social, eso pareciera que no importa. Y nos podíamos preguntar cómo se va a realizar la famosa inclusión sino mejorando la educación y la salud.

En El Comercio de hace una semana 18-07-2011 se titula “Baja calidad educativa, una sombra para el desarrollo” dice a continuación: “…Los exámenes aplicados en la región en comprensión lectora, matemáticas y ciencias fueron nefastos, los resultados nos arrojaban al final de la tabla” y terminaba “Es necesario que el próximo gobierno implemente políticas públicas que logren el ansiado ideal educativo, y eso también va por cuenta de un presupuesto mejor dotado”. Y si de educación hablamos, en los pueblos indígenas, solo había que leer el informe de la Defensoría, donde dice textualmente que la supervisión encontró problemas de inequidad y abandono educativo en las comunidades nativas e invocó al nuevo gobierno a implementar efectivamente un nuevo Plan Nacional de Educación Intercultural Bilingüe. Según el INEI existen 1’046,639 alumnos de 3 A 17 años y no se les respeta ni siquiera el derecho de una educación bilingüe.

Ojalá las clases dirigentes empiecen a preocuparse tanto por el crecimiento del capital social y humano, como lo hacen ahora por el crecimiento del capital económico, aunque aquel no se juegue en la Bolsa de Valores de Lima.

(*) Ex Responsable del Equipo de Campo y Proyectos Especiales de CIPCA-Piura
Ex Secretario Ejecutivo de la Diaconía para la Justicia y la Paz del Arzobispado de Piura y Tumbes
Premio Nacional “Eloy Arribas” en defensa del Ambiente y los Derechos Humanos
Miembro del Comité de Honor de PROÉTICA
Actualmente, Pro Vicario de Jaén y director de Radio Marañón de Jaén.

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