martes, 26 de junio de 2012

E D I T O R I A L




PREVENCIÓN PARA EL NIÑO


Si lo que vienen anunciando los principales diarios del país, sean vaticinios comprobados o no, el sentido de responsabilidad y previsión-prevención, obliga, empuja a movilizarse.

Frente a los anuncios que son apocalípticos, no queda otra cosa, defendernos o esperar con los brazos cruzados que venga el "Señor Niño", o tal vez otro evento, y nos envíe al otro mundo.

Talara, es una ciudad que sabe a la perfección los efectos de un diluvio llamado Niño, ya ha vivido en 1983 esta tragedia, por lo tanto, no debe esperar, no debe desperdiciar ni un minuto mas, para empuñar las herramientas y ponerse a trabajar.

Lo primero que tenemos que hacer, ahora que se están estructurando los presupuestos participativos, es orientarlos a generar los máximos mecanismos que permitan enfrentarnos con eficacia a la fuerza destructora del fenómeno anunciado. Entonces, corresponde dotarnos de las herramientas, maquinarias, contratación de profesionales, peritos que recomienden trabajos en los lugares mas vulnerables de la ciudad capital y distritos.

Una buena prevención, juiciosa, no es preocuparnos por el grado de inversiones que deben hacerse, el buen sentido del juicio y la experiencia nos dice que de no tomar las medidas, el cálculo de los daños es inmensamente superior, imprevisible; esto, sin tomar en cuenta la pérdida de vidas humanas, la ruina, la destrucción-

Para recordar en Talara el fenómeno del Niño de 1983 que nos cogió con los pantalones abajo y durmiendo como lirones: La ciudad se quedó sin agua, sin energía eléctrica casi por el término de un año; quedamos semi sepultados por el barro en muchos sectores; como consecuencia de la interrupción de las carreteras, quedamos desabastecidos de alimentos; la actividad laboral se interrumpió casi 6 meses; proliferó la especulación y se produjo un fenómeno de migración de mucha gente, generando un sinnúmero de asentamientos humanos y eso trajo lacras y pobreza.

La prevención no sólo convoca a las municipalidades a tomar medidas. Una ciudad industrial como Talara que en estos momentos pone los primeros cimientos en un proceso de Modernización de Refinería Talara, debe constituirse en estado de alerta, y convocar tanto a las autoridades de Petroperú como del Gobierno, a precaver y cautelar el grado de inversiones que el proceso representa.

Y como ocurre con el peligro de las Instalaciones de Petroperú, su Refinería, también la situación obliga a diseñar un mapa de vulnerabilidades que comprenda a hospitales, mercados, centros educativos, puentes, estructuras de abastecimiento de agua, energía, desagüe, etc.

Otros mecanismos como: Policía Nacional de Perú, Defensa Civil, seguridad ciudadana.. ya deberían activarse de modo específico y permanente; es perentorio efectuar un censo para conocer cuantos vehículos contraincendios tiene la ciudad, ambulancias. Hay que preparar zonas de evacuación donde trasladar a la población que perderá sus viviendas.

Hay que examinar mediante comentario de peritos que sectores, viviendas, sobre todo las que recientemente se han ubicado en cerros, quebradas, terrenos accidentados, recomendando desde ahora una evacuación derivándoles a zonas seguras y exentas de riesgos. (Primera parte)


DIRECTOR DE ASPETA
RICALDI  RAMIREZ  RUIZ

No hay comentarios.:

Publicar un comentario