COMENTARIOS DE LA ADMINISTRACION MUNICIPAL Y SU IMPLICANCIA EN EL DESARROLLO DE LA PROVINCIA DE TALARA

 

 

 

 

A los largo de los últimos 15 años el Gobierno Local de la Municipalidad Provincial de Talara, ha percibido ingresos por transferencias del Gobierno Central, permitiéndole “Administrar” mayores recursos económicos, asignados gran parte de los mismos, al desarrollo de las políticas de descentralización, dadas por el gobierno central, la mismas que comprendían asumir programas y proyectos sociales, ejecutadas con el financiamiento respectivo, para lo cual la institución edil, ha tenido que implementar con mayores recursos humanos y poder afrontar este reto.

En comparación con otras municipalidades a nivel nacional, la Municipalidad  Provincial de Talara, recibe mayores recursos económicos, siendo las más importantes las trasferencias provenientes por concepto de canon petrolero y del fondo de compensación municipal – FONCOMUN.

Los gobiernos de turno de estos últimos periodos, no tuvieron mayor visión para el futuro de la provincia, realizando acciones sin una debida planificación estratégica para el desarrollo provincial, a corto mediano y largo plazo. En su gran mayoría estos gobiernos de turno realizaban pequeñas obras de infraestructura en cumplimiento de su débil Plan de Gobierno y a promesas electorales, aquellas que le significaban un reflejo hacia la población de su paso por la administración pública municipal.

Sin embargo, el cumplimiento de estos planes de gobierno y sobretodo de las obras, se han visto empañadas por la mala administración de los recursos públicos y por los actos de corrupción, los mismos que han significado el desorden administrativo, mala calidad de las obras, sobreendeudamiento con entidades financieras, proveedores, contratistas y cargas sociales de las aportaciones y retenciones del personal, así como  contratación excesiva de personal, originando el rechazo y descontento de la población.

Los gobernantes de turno al llegar al gobierno municipal, lo hacen con un conjunto de personal de confianza, los cuales son ubicadas como funcionarios, los mismos que muchas veces carecen de una preparación y especialización en administración pública ni menos municipal, desconociendo las normativas aplicables en cada uno de los sistemas administrativos, originando no solamente el no cumplimiento de los objetivos institucionales, sino el atrazo en la ejecución de los planes y proyectos de desarrollo locales y regionales, reflejando una mala atención a los usuarios y ciudadanos en las necesidades de desarrollo local, siendo sometidos por su actuar a los procesos administrativos, civiles y penales.

Hace poco hemos visto como las ansias de ser alcalde por parte de dos personas, llevaron no solamente el tomar a la fuerza la institución municipal, originando el desconcierto, caos y la pérdida de bienes materiales y archivos de documentos muy importantes,  sino también, el enfrentamiento de vecinos y trabajadores que pretendían defender al que creían que con derecho debía ser el representante de la Municipalidad de Talara. 

Por otro lado a pesar de que la institución municipal cuenta con un personal estable o nombrado con capacitación técnica y profesional y con experiencia en el quehacer público, no es tomado en cuenta en las competencias institucionales por los gobiernos de turno, argumentando que no tienen el apoyo que ellos consideran necesario, originando no solamente mayor malestar y un ambiente organizacional negativo, sino el mal uso de los recursos humanos y económicos, porque a pesar de no efectuar labores productivas, se les debe remunerar al personal conforme a los derechos laborales vigentes.

La percepción de los ciudadanos o el valor público, frente al actuar de la Municipalidad Provincial de Talara, es muy pobre o a veces con  indicadores negativos, ello se debe porque la institución se ha manejado administrativamente para cubrir las necesidades políticas del momento, dejando de lado el quehacer técnico y sin tener en cuenta una adecuada proyección en el manejo de los recursos públicos, en atención a la demanda de las necesidades ciudadanas.

La falta de líderes en la ciudadanía con preparación adecuada en administración pública y políticas públicas, han desgastado la verdadera vocación de servicio que requiere nuestra provincia, originando el desinterés de la población en participar en acciones políticas que necesita nuestra región.

Pero no debemos ser pesimistas y debemos fortalecer la actividad del servicio público, la misma que es muy necesaria para poder encaminar las políticas públicas, inculcando a nuestros jóvenes que participen en la vida política la misma que redundara en el desarrollo de nuestra provincia.