lunes, 28 de noviembre de 2011

E  D  I  T  O  R  I  A  L
"Si sientes conflictos con mis opiniones,
reivindícate con las tuyas"


EL COMPORTAMIENTO ESCASAMENTE ETICO EN EL DESARROLLO PERIODÍSTICO.-
 
 
Siempre hemos venido luchando contra el desdén de los diarios regionales por la tarea de informar minimizando, ocultando, distrayendo el panorama importante de la provincia petrolera de Talara.  Nuestra queja como periodistas de este terruño, ha sido recordar a los medios piuranos, que su deber es informar con equidad.  No puede ser un buen medio dirigido por equipos de periodistas que conocen la materia, cuando la casi totalidad de páginas de los diarios se ocupan preferentemente de la ciudad capital regional, ignorando a las demás provincias.

Ahora sucede que el presente caso, como todo mal, se ha ido desmejorando a tal extremo, que al desdén, a la sambenita intención de marginar informativamente a una de las provincias mas importantes por el aporte de sus recursos, con decepción apreciamos que mismos periodistas del medio provincial, en comportamiento muy censurable, impropio de la ética periodística, vienen haciendo coro, sumándose a un voluntad deleznable perjudicial a Talara.

Nos referimos al caso concreto de periodistas-corresponsales-, quizá no todos, y de un periódico de origen tumbesino que se difunde en la Provincia.  Ocurre que obsecuentemente, algunos de estos señores corresponsales, establecen buenas migas con autoridades de todos los niveles -preferentemente-  municipales, conviniendo realizar información, trasgrediendo los conceptos básicos de la objetividad, la transparencia y la obligación de ponderar los hechos, respetando los derechos que tiene el público a la información sin maquillaje, adulterio, información mediatizada, traficando el criterio y la opinión.

No sabemos si en la componenda informativa intervienen los propietarios de los medios, los directores, jefes de corresponsalías, ya que no advierten en sus filtros de control, cuando los reiterativos informes, noticias, envíos de los corresponsales, tienen un giro muy placentero.  Se informa, resaltan, se vuelven pitonisos destacando, aplaudiendo realizaciones que ni siquiera están en la incubadora armonizando con la realidad.

Indudablemente que los llamados corresponsales, pasan luego por las oficinas de tesorería de las dependencias, recibiendo sus compensaciones por ser aliados para mantener una fachada de falacias, grotesca alteración de la realidad, confundiendo a la opinión ciudadana.  Nuestro medio, en días pasados emitió una opinión sobre el empobrecido trabajo, aporte mediocre del señor Jefe del Serenazgo de Talara.  Opinamos en la auténtica realidad, las calles llenas de peligros mil, y el ex. Mayor Carlos Segovia Chavez, posando muy jubiloso para un periódíco de origen  tumbesino.

Ese mismo periódico, en su edición del domingo 28 de noviembre (Ayer), publica bajo el titular: "Talara a la vanguardia tecnológica en lucha contra la delincuencia", una extensa crónica a 5 columnas que cubren el largo y ancho de una página.  Se colige a toda prueba de objetividad, que el mencionado medio, expresa su empatía con la autoridad, con un trabajo que aún maquillándole o tratando de darle vida artificial con formol, no merece llamar que es: "vanguardia tecnológica".  El ex. mayor Carlos Segovia Chávez, asumió el cargo 6 meses atrás, y, si ese cuerpo del Serenazgo de Talara asimiló alguna experiencia, ese esfuerzo no le corresponde.  La gente, los vecinos, no les consta, que estamos ad portas de una vanguardia tecnológica; viven de acosos, sufren, padecen crónicas de miedo y terror, que se reflejan en las calles.

Por donde se le mire, aquel comportamiento de uno que otro corresponsal, y del periódico tumbesino, no satisfacen, no cumplen con los fundamentales principios éticos que configuran a un verdadero modelo periodístico.  Es muy censurable que la noticia o la información se mercantilice, se negocie una imagen que no se merecen, rezagando verdaderos derechos de saludable información.

No queremos llegar a la comparación que pueda lesionar el ego de estos señores corresponsales, de alguna manera lobista; que han encontrado la mejor manera para mejorar el nivel de sus ingresos salariales, cuidando espaldas;  alguién dijo, es la versión moderna de los "chalecos informativos para autoridades que ganan indulgencias, mantienen imagen, a costillas de plumas alquiladas.

DIRECTOR DE ASPETA
RICALDI RAMIREZ RUIZ

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