PRIMERA PALABRA

AL FINAL MAS DE LO MISMO

 

 

Cuando por primera vez se anunció la ejecución de un "Proyecto de Modernización de Refinería Talara"-PMRT, hace mas de 7 años; la idea encandiló a Talara, de manera muy singular a jóvenes ávidos de captar una espectativa de trabajo.  Hacía mucho tiempo que el Estado ni la misma Petroperú, invertía a mérito de alcanzar nuevas metas, oportunidades para  logros empresariales.

Para redondear la idea, el PMRT constituía - con la máxima razón -  el mecanismo hecho a la medida de las exigencias que necesitaba el País en todos los conceptos;  particularmente, la ciudad y provincia de Talara condenada a vivir en un proceso de receso social desde el año 1996, desde cuando se operó la nefasta decisión de privatizar los recursos petroleros.

Con esta tristemente célebre pivatización; Petróleos del Perú, empresa bandera en el sector hidrocarburos del Estado, perdió su condición de ser autogestionaria, integral, suficiente, dejó de sustentar una población laboral en mas de 10 mil trabajadores.  Tanto su decisión de formarla, después de la partida de la Internacional Petroleum Company, evidenció que el trabajador peruano si podía manejar sus elevados destinos, como conducirla por el sendero del éxito y prosperidad.

De tal forma que el periodo 1968 a 1996 (28 años), sirvió para demostrar que el trabajador peruano aportó para este sector, su preparación, eficiencia, capacidad, tecnología.  Al revisar la historia de crecimiento, seguramente que se ubicarán todos los avances registrados como construcciones de plantas, unidadesde vacío, nuevas refinerías, oleoducto, filiales, nuevos productos, gasolinas ecológicas, plantas petroquímicas etc. etc.

Todo este enorme y portentoso proyecto, se truncó con el proceso de la errada privatización ejecutada por el gobierno de Fujimori.  Por esto, al anunciarse el PMRT en el año 2008, acompañado de otras importantes medidas rectificatorias como la ley 28840, recupero de Lotes Petroleros y regreso de la integración vertical de Petroperú, se festejó la idea de retomar la pujanza de una actividad de tecnología muy importante para el Perú.

El PMRT, como su nombre lo indica,  "Modernización de Refinería Talara", con una inversión de $3,700 millones (Dólares), no podía menos que volver a creer en el milagro de un nuevo renacer empresarial; fundamentalmente,  dar cabida, participación a las nuevas generaciones de trabajadores lugareños, generación de jóvenes que se matuvieron en lucha y con la promesa que serían ellos, los que directamente sin criterios ni intenciones de nuevas fórmulas de explotación, con todos derecho histórico asusmirían la nuevos retos en Petroperú.

Asi se prometió y por los cuatro extremos cardinales se aseguró este propósito.  En ello, participaron el mismo Presidente Ollanta Humala, La suscribiente del contrato la empresas española "Técnicas Reunidas", las autoridades de Petroperú, la Municipalidad de Talara, la mesa de Diálogo, Cámara de Comercio; todas ellas, así lo prometieron y certificaron.

Sin embargo, una misma nota de prensa emitida desde una oficina de Comunicaciones de Petroperú, al anunciar que una tercería, una service, abría sus puertas en los requerimientos de trabajo para el PMRT, se trae abajo todas las esperanzas de transitar por un camino diferentes al viejo explotador enganche de trabajadores.  ES MAS DE LO MISMO, una intención que reedita encubiertos