POR QUÉ NO SE DICE NADA DEL REGRESO DE LOS LOTES PETROLEROS?
El Gobierno Peruano presidido por el Presidente Ollanta Humala, dentro de una estrategia muy rara y que comienza a inquietar y sembrar dudas entre los peruanos, está jugando un tiempo sospechoso con la decisión final que el Perú debe asumir con respecto a los Lotes Petroleros ubicados en su mayoría en el noroeste peruano (TALARA).La situación indubitable deviene de la circunstancia que existiendo la Ley 28840 quien dispone esa decisión y la reintegración vertical de Petroperú, los peruanos no entendemos como ahora se anteponen mil pretextos para decidir un paso fundamental que permita al Perú: 1).- Reinsertarlarse en todo los procesos y etapas de la actividad petrolera; 2).- Contar con el crudo suficiente para operar las exigencias de la nueva Refinería de Talara; 3).- Recuperar el manejo de la Renta Petrolera hoy en mano de las transnacionales operadoras de los Lotes.
Si se presentara el caso que el Ejecutivo como se viene evidenciando dentro de su política petrolera no tuviera la intención de dar cumplimiento a la recuperación de los lotes petroleros, no estaría haciendo otra cosa que sabotear la ejecución del Proyecto Modernización Refinería Talara-PMRT. Esa es la lectura, no existe otra, en tanto Petroperú no podrá operar su Refinería optimizada si se le somete a que siga comprando el crudo a precio internacional vendido por terceros.
A ningún peruano escapan dos cosas: Que el gobierno del Presidente Ollanta ha variado en 180º la aplicación de su Programa de Gobierno el mismo anunciado antes de la asunción del mando; Otro, que ofreció ir a la recuperación del patrimonio peruano, recursos, riqueza en manos del capital extranjero; en materia petrolera ofreció la revisión de contratos entreguistas y lesivos a los intereses del Perú.
Ocurre que ahora el referido gobierno por intermedio del Ministerio de Economia y Finanzas, Energía y Minas, de la comisión del mismo nombre en el Congreso de la República, organismos como Perú-Petro, operan el mismo discursos soslayando las promesas primigenias y ahora dejando entrever que en todo caso se establecerían contratos y convenios de Asociación con el capital foráneo, donde Petroperú tendría participación desde 25 a 49%. Lo que en buen romance significa que no manejaríamos soberanamente la administración conforme lo indica la Ley.
Si Petroperú recupera lo que es suyo, incluyendo la sísmica operada, reservas, técnicos, equipos, ya no encararía el temor al fantasma del súbito incremento de los precios del crudo en el mercado internacional, ese fenómeno le ha venido afectando toda vez que cuando compraba crudo caro lo refinaba y repentinamente bajaba de crecio, perdía dinero. Esa experiencia puede repetirse cuando ingrese a operar la nueva Refinería y no pueda cumplir con sus metas.
Importante es entender que no dar cumplimiento a un proceso que conviene a los intereses soberanos del Perú, se está frustrando el desarrollo de la industria energética base del crecimiento asegurado de la Nación. El Perú se atrasaría en competitividad en relación al mercado de los hidrocarburos, y fundamentalmente si no cumple como país petrolero en producir combustibles limpios (25 partes de azufre/millón) quedaría descartado, se le retiraría la licencia comercial y en ese momento se cumpliría la profecía de Fujimori de ser un país amarrado con pita.
El silencio que tanto el gobierno como el Congreso de la República guardan sobre el caso, es sintomático, llena el cielo de un panorama de nubarrones muy inquietantes. Si esto ocurre, el presente gobierno llamado nacionalista, no tendría nada que reclamarle a la dictadura fujimorista autor de la privatización mas claudicante de la historia. Petroperú no se vende, Petroperú se defiende se ha dicho y repetido hasta la saciedad, pero no es suficiente decirlo, hay que probarlo y la recuperación de los Lotes petroleros es un factor urgente y ahora.
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